El perdón

El perdón.

Seguramente muchos de vosotros habéis leído más de algún artículo sobre este tema.

Y es que en verdad el “Perdón” es una palabra de la que rehuimos con frecuencia.

¿Por qué nos cuesta tanto aceptar el perdón?

En mi opinión, es nuestro ego el causante de la no aceptación de esta palabra.

Como podría yo perdonar a esa persona que me a dañado por tanto tiempo?

Jamás le perdonaré.

Afirmaciones como estas parecieran nunca querer abandonar nuestras vidas.

Pero porque el ego no nos permite aceptar el perdón?

Simplemente por que hemos recibido como herencia el “orgullo”.

El causante de interminables conflictos familiares, personales, mundiales, etc.

El mismo que a lo largo de nuestra historia a causado millones de muertes tan solo por pensar distinto.

Ese que es capaz de sacar el lado más oscuro del ser humano.

El “orgullo” :

El cáncer más destructivo y ramificado en nuestra sociedad actual.

Vamos por la vida creyendo ser los dueños de la verdad absoluta, y dañamos y nos dejamos dañar por todo aquel que piense distinto a nosotros.

No somos capaces de comprender que tanto tu verdad como la mía son igual de ciertas.

No podemos aceptar que en este mundo tú y yo podemos convivir amorosamente por que hay sitio para todos.

Nos indigna renunciar a nuestro punto de vista y otorgarle la razón al otro.

Somos tan egoístas, que ni con nuestro ser querido nos permitimos ceder.

y de nuevo.

Cual es la clave para perdonarme y perdonar?

Amarnos.

Cuando comenzamos a amarnos, nos damos cuenta que no necesitamos tener la razón.

Ya la verdad no es una necesidad por que nosotros somos la única verdad.

Nuestra alma es la verdad.

Mi amor es la verdad.

Mi corazón es la verdad.

Mis sentimientos son la verdad.

Cuando la razón se convierte en  un mero observador, y el corazón toma el protagonismo de nuestra historia, la vida comienza a sorprendernos maravillosamente.

Perdónate, Y podrás perdonar.